Descripción
DESCRIPCIÓN:
La brillante turquesa, la santa, sagrada, protectora y curativa turquesa, ha sido venerada desde tiempos ancestrales.
Representa la conciencia de la tierra que une el cielo y la tierra: la turquesa azul es el padre cielo y la turquesa verde es la madre tierra. Unificando así, las energías masculinas y femeninas.
Es una piedra de sabiduría folclórica y magia natural que amplifica la conexión con tu historia indígena.
Es una piedra de purificación. Disipa las energías negativas y limpia la bruma electromagnética, proporcionando protección contra los polucionantes del medio ambiente.
BENEFICIOS ESPIRITUALES:
La turquesa crea una armadura a tu alrededor que te protege y te fortalece mientras te diriges valientemente hacia la verdad y la integridad.
Es una piedra protectora. Se dice que cambia de color para avisar del peligro de infidelidad.
Fomenta la sintonía espiritual y potencia la comunicación con los mundos físico y espiritual. Puesta sobre el tercer ojo, potencia la intuición y la meditación. Sobre el chakra garganta libera antiguos votos, inhibiciones y prohibiciones y permite que el alma vuelva a expresarse. Explora las vidas pasadas y muestra que la creación de tu propio “destino” es un proceso continuo y depende de lo que hagas a cada momento.
BENEFICIOS EMOCIONALES:
Es una piedra que fortalece i disuelve la actitud de mártir o el autosabotaje.
Emocionalmente estabiliza las alteraciones del estado de ánimo y aporta calma interna. Estimula el amor romántico.
Sabiduría terrenal, totalidad, protección, integridad.
BENEFICIOS FISICOS:
La turquesa es una sanadora muy eficaz que ofrece bienestar al cuerpo y solaz al espíritu.
excelente para tratar estados de agotamiento, depresión o ataques de pánico. Una de sus funciones protectoras es defender de influencias externas o de polucionantes atmosféricos.
La turquesa fortalece los meridianos corporales y los campos energéticos sutiles. Potencia los sistemas físico e inmunitario y regenera los tejidos. Favorece la asimilación de los nutrientes, alivia la polución y las infecciones virales y cura la totalidad del cuerpo, especialmente los ojos, incluyendo las cataratas. Reduce el exceso de acidez y trata la gota, el reuma y los problemas estomacales. Esta piedra es antiinflamatoria y desintoxicamente, aliviando los calambres y el dolor